Maquinaria para churrerías. Maquinaria para hacer churros
Fogón para churros automático 14L Inhospan
Máquina manual para gran producción o como equipo profesional. Por su calidad se trata de una máquina muy duradera y resistente para su uso industrial.
Fogón para churros eco 14L Inhospan
Máquina manual de churros 14L para pequeña producción o útil como equipo de iniciación.
Montar una churrería, negocio seguro
El churro es el único producto alimenticio que se encuentra en todas y cada una de las culturas y civilizaciones humanas. Podemos considerar que este alimento es un bien cultural de toda la humanidad.
Solo con una masa hecha a base de harina, agua, sal, y cocinada en aceite, se prepara esta “fruta de sartén”. Son muy populares en países como Portugal, Francia, América Latina, Filipinas, Bélgica, Estados Unidos y en España, donde nos consideramos los auténticos creadores de este manjar.
En cualquier caso, los churros son un alimento de gran aceptación en toda Europa y especialmente en nuestro país, por lo que montar una churrería tiene muchas posibilidades de éxito.
¿Quieres saber qué necesitas para montar una churrería? Sigue leyendo.
¿Qué necesitas para montar una churrería?
Si quieres montar una churrería, hay algunos elementos que hay que tener en cuenta, los mismos que son válidos para cualquier otro tipo de negocio relacionado con la hostelería. Hay que empezar por definir en un proyecto cuál es el modelo de empresa por el que vas a optar, pensar en el valor añadido para sobresalir de la competencia, cuál va a ser tu cliente objetivo y qué estrategias vas a emplear para llegar hasta ellos, qué recursos vas a necesitar, quiénes serán tus proveedores, sin vas a necesitar empleados, si vas a llevar a cabo algún tipo de actividad complementaria…
Son muchos los elementos iguales a cualquier otro negocio del sector hostelero. También aquí vas a tener que calcular cuáles son los costes fijos, variables y cuáles serán las fuentes de ingresos y horarios. Es imprescindible realizar el plan de empresa, donde se delimitarán las áreas imprescindibles para que el negocio pueda llevarse a cabo. Aquí se detallan factores tan importantes como la financiación, el plan de marketing o el análisis de la competencia, etc.
Pero, evidentemente, existen diferencias. Cuando decidimos montar una churrería, se debe tener en cuenta que existe una competencia bastante asentada en cada ciudad, pueblo e incluso barrio.
Y es que estamos ante un producto considerado tradicional en nuestro país. Y no solo que cualquiera, en su propia casa, puede hacer unos churros, pues los ingredientes y la forma de hacerlo es sumamente sencilla, sino que la competencia no es pequeña en el sector.
La clave está en elaborarlos de manera tal que se diferencie del resto en sabor, calidad, precio… Se debe conseguir producir y mantener en el tiempo ese churro perfectamente delicioso, del que se hable como referente en toda la zona, dar con el toque exacto que enamore a los consumidores de churros.
Este objetivo se va a poder alcanzar, fundamentalmente, por la maquinaria que se utilice en la churrería para la fabricación de churros.
Maquinaria para una churrería
Sí, es posible innovar en un sector tan tradicional y expandido, se puede presentar de manera diferente, pues es un producto que se presta a nuevas mezclas y experimentos. Por ejemplo, los churros rellenos de crema o chocolate, envueltos en azúcar o helados, toda una sensación en los Estados Unidos de Norteamérica. Productos que van a depender de la maquinaria utilizada en la elaboración, que permiten que sea de calidad y además se produzca de manera totalmente automatizada.
En cualquier caso, los pasos son los mismos: amasado, extrusión, fritura y presentación. Todas y cada una de estas 4 fases implican atención, mantenimiento y cuidado, solo de este modo se conseguirá fidelizar a la clientela.
Las máquinas imprescindibles para hacer churros de forma profesional son las churreras profesionales, las amasadoras y las freidoras industriales, aunque el equipo podría completarse con una chocolatera, una máquina de algodón de azúcar, de buñuelos… según si queremos ampliar el número de productos a ofrecer.
Churreras profesionales
El mercado dispone tanto de churreras manuales como semiautomáticas y también automáticas. Todas están diseñadas para poder elaborar diferentes tipos de churros (rectos, de lazo, de rosca, porras…), es el corazón de la churrería, el elemento fundamental para hacer funcionar este negocio, por lo que deberemos elegirla con detenimiento para que dure mucho tiempo ofreciendo un buen servicio. Debe estar fabricada en acero inoxidable, y se debe prestar atención al tipo de corte que le haga a los churros, así como el mecanismo de presión para facilitar al máximo el trabajo del maestro churrero.
Las churreras manuales son las más tradicionales, pero los nuevos diseños colaboran para que el churrero realice el menor esfuerzo posible. Siempre construidas en acero inoxidable, su capacidad se encuentra entre los 2 y los 5 litros.
Las churreras semiautomáticas, por su parte, permiten variar la velocidad de expulsión de la masa, lleva un sistema de corte manual y pueden producir churros rectos, de lazo, huecos para rellenar…
Las máquinas de churros automáticas poseen la cualidad de poder graduar tanto la velocidad de expulsión como el sistema de corte y, además, memorizarlo, con control táctil y capacidad para hacer cualquier tipo de churro.
La freidora industrial
Otro de los elementos imprescindibles en cualquier churrería. En esta máquina lo que hay que valorar es su superficie más que sus litros de capacidad, ya que será este valor el que nos indique cuál será la cantidad máxima de producción capaz de sacar adelante en un día normal de trabajo. A mayor superficie, más capacidad para freír churros.
La freidora debe estar bien aislada y ser eficiente en su consumo para procurar un menor gasto energético. Para el ahorro del aceite, volvemos a insistir; mayor superficie y poca profundidad. Existen dos modalidades entre las que elegir, la freidora eléctrica y a gas.
La amasadora profesional
Es con esta máquina con la que se inicia todo el proceso. Según el tipo de amasadora, se podrán trabajar distintos tipos de masas, más duras para los churros o más blandas para las porras. Igual de importante es elegir una amasadora como los diferentes accesorios que se van a necesitar, como, por ejemplo, barreños de diferentes capacidades, libradores, palas…
Es a partir de los 10 kg de masa cuando se va a necesitar una máquina amasadora, ya que en estos pesos es muy complicado amasar a mano. Amasar con una de estas máquinas es la única manera de asegurarse de que la masa quede perfectamente homogénea.
Hacer churros no es difícil, y además es un producto que ofrece un alto margen de beneficios. Desde la experiencia en este sector, se recomienda invertir en maquinaría para churrería de calidad, así como también en una buena materia prima, pues son las dos piezas claves para lograr el éxito en este negocio.
La maquinaría de churrería es el motor del negocio. Es por esto que se debe elegir la que sea capaz de adaptarse al volumen de producción, la que permita ahorrar tiempo y dinero trabajando eficientemente y con el menor esfuerzo posible. No hay que olvidar que a la hora de elegir y comprar la maquinaria para churrería, estas deben contar con el certificado correspondiente, señal de que han superado los controles de calidad.


